Hoy vamos a hablar de las ya populares semillas de chía, ya que en los últimos tiempos podemos ver con frecuencia como nos recomiendan añadirlas a nuestras recetas para una vida más sana. Pero, ¿sabes como hay que consumir las semillas de chía? Muchas gurús de Internet las recomiendan en sus vídeos, incluso desconociendo como hay que usarlas, y el peligro que puede conllevar consumirlas secas, por ello, para que puedas aprovechar su potencial al máximo, y para que no te hagan daño al comerlas, hoy vamos a aprender sobre chía.
Las semillas de chía se han popularizado como un superalimento que o bien puede servir para complementar la dieta de todos aquellos que quieren adentrarse en la dieta vegana o vegetariana, o bien puede ayudar a los que tienen otro tipo de dieta, como por ejemplo la mediterranea, pero que quieren aportar más salud a sus vidas.
¿Qué son las semillas de chía?
Las semillas de chía son las semillas de una planta llamada Salvia Hispánica, que es originaria de México, El salvador, Nicaragua y Guatemala.
¿Qué nutrientes y beneficios aportan?
Es una de las plantas que posee mayor concentración de ácidos grasos alfa-linolénico Omega 3 (junto con las semillas de lino), también contiene calcio, boro, proteínas, potasio, hierro, antioxidantes, magnesio, manganeso, zinc, cobre y niacina.
Tiene cinco veces más calcio que la leche de vaca, el doble de potasio que los plátanos, el triple de antioxidante que los arándanos, el triple de hierro que las espinacas, y siete veces más hierro que el salmón, todo esto, como veis, la convierte en un superalimento. También contiene una gran cantidad de fibra.
Son buenísimas como fibra para limpiar los intestinos y mejorar el transito intestinal, se dice que incluso previene enfermedades del intestino.
La chía contiene una gran cantidad de hidratos de carbono, pero no es perjudicial para los diabéticos, ya que el gel que produce hace que estos hidratos de carbono sean fibra insoluble, durante la digestión actúa como una barrera para las enzimas digestivas, e impide que transformen estos hidratos de carbono en azúcares sencillos.
¿Cómo prepararlas para consumirlas?
Es necesario hidratar las semillas de chía para consumirlas, siempre debes tomarlas hidratadas. Para ello puedes simplemente llenar el fondo de un bote de cristal con semillas de chía y llenar el resto con agua. Luego hay cerrar y agitar el bote, y dejarlo reposar. Cómo mínimo tienes que esperar 15 minutos, pero estas semillas hidratadas te durarán hasta una semana si las metes en el frigorífico. Para ser más específicos, si no quieres tener que vaciar agua, puedes coger un bote más pequeño que el que yo usé, y llenar un cuarto con semillas y el resto con agua, y cuando estén listas, la chía llegará a la boca del bote.
Otra manera de hidratarla es en el momento inmediato, por ejemplo, si vas a tomarte un zumo o un smoothie, y otro alimento que sea líquido o medio líquido, puedes moler chía y añadirselo, y dejar reposar como mínimo 15 minutos. También puedes dejarla en agua como mínimo 15 minutos y luego añadirla a la receta mientras la preparas.
¿Por qué es peligroso consumirlas secas?
Hay que informarse muy bien antes de consumir alimentos nuevos que nunca antes habíamos incluido en nuestra dieta. Desgraciadamente muchas grandes gurús de Internet que muestran recetas donde usan chía, no se informan, puede que porque solo la consuman por moda o porque les ofrecen hacer una promoción, la consumen mal, y sin quererlo podrían provocar molestias y daños en la salud de las personas que las ven y se animan a usar las semillas de chía. La chía bien usada es inofensiva, es decir, hidratada, pero si la consumimos seca puede ser muy peligrosa.
Cuando las semillas de chía se hidratan aumentan doce veces su tamaño, en esto tardan como mínimo 15 minutos, pero pueden aumentar más de tamaño si pasa más tiempo, esto quiere decir, que si tomas chía seca, en el transcurso de la digestión, al entrar en contacto con otros líquidos que hayas consumido, y con los fluidos presentes durante la propia digestión, la chía aumentará de tamaño dentro de tu sistema digestivo, y puede causarte un atasco en los intestinos. Recuerda que cuando la chía se activa crea una especie de sustancia mucilaginosa, pegajosa, como un gel, que se pegará a las paredes del intestino. Si consumes la chía hidratada, esa sustancia se mezclará con todos los demás ingredientes, entrará en tu sistema digestivo en pequeñas porciones mezcladas con otros alimentos, pero si la consumes seca, se hará un bloque dentro de tu intestino.
¿A qué alimentos puedo añadir chía?
Al yogur de soja, al porridge o gachas de avena, a los zumos, smoothies y smoothies bowls, a las tostadas con aguacate o con aceite, etc.
Smoothie que contiene chía. |
¿Donde encontrarlas?
Actualmente es muy fácil de conseguir en supermercados, yo personalmente la he encontrado tanto en Carrefour como en Mercadona. También se puede conseguir en tiendas de dietética, de nutrición vegana y vegetariana o herbolarios.
Espero que esta entrada haya despejado todas vuestras dudas sobre las semillas de chía. Nos leemos en próximas entradas.
Es un texto original de IsaLot, todos los derechos reservados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario